El rugby dijo presente rompiendo muros

En las últimas semanas el penal de Villa Urquíza estuvo en boca de todos. Sus sucesos (de público conocimiento) recorrieron los medios de comunicación. Pero, entre tantas desgracias se encuentran los presos del pabellón 8 quienes huyen de esto con el deporte.

La UAR junto a Espartanos en la provincia de Tucumán.

Más allá de la muerte, el dolor, la ansiedad y desolación que proporcionan las oscuras y frías celdas, nace una luz de esperanza para los internos. Son 35 hombres privados de la libertad que en el rugby encuentran una salida. Un escape a su cruel realidad. Su equipo es parte de un proyecto llamado UPAL, "Un Pase a la Libertad", que lleva adelante el Gobierno de la Provincia. "Arrancamos en julio del año pasado. Lo que queríamos hacer era transmitir los valores a través del deporte. Patricio Peroni es el coordinador general. El objetivo principal del programa es la reinserción laboral verdadera. Después de cierto tiempo de ver que estas personas están bien pasamos a la familia. De ahí tenes que intentar que estos tipos salgan del lugar donde viven. Imagínate que están acá vos lo pones bien, la familia se pone bien pero vuelven al sifón o la bombilla. En el programa este están los más picantes; los Asevedo, los González, Amín, Conti, Orellana", contó el entrenador Rene Sueldo.

Entre otras cosas, Sueldo dijo: "Acá hay un terrible problema que es la droga. El 95 por ciento de las personas que están en contexto de encierro están drogadas. La cárcel es la universidad del delito. De acá nadie sale mejor de lo que entró, salvo que le haya pasado de todo. Hoy por hoy la cárcel no reinserta a nadie y la sociedad mucho menos".

Pero, ¿Cómo hablar de reinserción de personas que han robado vidas?, que dejaron a familias destrozadas, incompletas. Esto si se logra sería parte de un arduo trabajo para la sociedad en general. A largo plazo por supuesto. El cual también se debería llevar a cabo con los familiares damnificados.